Vamos a mostrar algunos pasos que pueden ser útiles para evaluar un sitio web antes de rediseñarlo y descartar el sitio web existente en su totalidad.
Del lado de cliente.
¿Quiere el cliente un CMS distinto?
La gente sin muchos conocimientos técnicos se sienten cómodos con su “manera de hacer las cosas”, sin importar lo ineficiente o anticuado que esto sea. Si un sitio web tiene cierto tiempo, es probable que este usando un CMS desactualizado. Tienes que enseñar al cliente que un nuevo CMS puede ayudarle a hacer las cosas más rápido, más fácil o ahorrar tiempo y dinero.
¿Puede el servidor soportar el diseño?
En muchos casos no se dispondrá de un servidor que soporte el lenguage que se selecciona. Por ejemplo estás desarrollando un sitio con PHP, pero el servidor del cliente solo ejecuta ASP. En este caso se debe hablar para trasladar el servidor o cambiarlo de tecnología. Aunque en algunos casos encontrarás que el departamento encargado prefiere dejar las cosas tal y como están, por lo que estará fuera de tu control.
¿Tu solución ahorrará dinero?
El cliente estará mirando de recuperar la inversión realizada. El nuevo diseño será una “solucion tecnológica” y tiene que ayudar a resolver un problema. Si no puedes resolver un problema o mejoras las prestaciones del sitio actual deberás de aclararlo antes de empezar.
¿Cuántos datos existentes tiene actualmente?
Un sitio que sea un gran directorio, contiene gran cantidad de información. Un fabricante, una herramienta de la empresa, o un directorio que vende pequeñas piezas, podria tener miles de arituclos que tendrán que implementarse en el nuevo sitio. Todos estos datos tienen que tenerse en cuenta antes de empezar con el rediseño. En algunos casos al cliente no le importará tener que introducir los datos de nuevo, pero en otros casos (la mayoría) tendrás que ser capaz de importar los datos existentes en el nuevo sitio web.